Sol y Piel

Errores al aplicar el protector solar

Errores al aplicar el protector solar

El uso de protector solar es una estrategia preventiva y terapéutica fundamental frente al fotoenvejecimiento y el cáncer de piel.

Pero existen algunos errores comunes al aplicarlo.

1. No aplicar la cantidad suficiente

Para conseguir el nivel de protección solar que indica el protector es imprescindible aplicar la dosis adecuada. Es necesario aplicar 2 miligramos por centímetro cuadrado de piel expuesta; lo que equivale a un vaso de crema para todo el cuerpo, 6 cucharitas de té.

A modo orientativo, puede utilizar la cantidad de una cucharita para las piernas, una para los brazos, una para el frente del torso, una para la espalda, una para el rostro y la última para aplicar a zonas más pequeñas. Aplicar en cuello, cara, orejas, parte superior de los pies y piernas. El problema es que, si no se usa la cantidad suficiente, el nivel de FPS decrece exponencialmente.

2. Olvidar algunas zonas
Labios, párpados, cejas, orejas, parte posterior del cuello, pies, axilas y cuero cabelludo son áreas que no solemos tener en cuenta.
Por ejemplo, el pelo tiene su papel como protector y regulador de la temperatura de la cabeza, pero la gente que tiene poca densidad, lo lleva corto o si tiene raya hacia un lado, es vulnerable a que el sol incida con fuerza en el cuero cabelludo llegando a producir quemaduras.
También el lavado muy frecuente de las manos durante los días de sol, ya sea por el sudor, por la arena o por estar en contacto con el agua; elimina
la protección que teníamos, por lo que hay que aplicar protección solar en esta zona con más frecuencia.
Para evitar dejar zonas sin cubrir, aplicar la fotoprotección sin ropa y delante de un espejo; y utilizar un sombrero o gorra. Usar también cremas o barras de labios que contengan protección solar, y reaplicarse con cierta frecuencia, especialmente si se come o bebe.

3. No leer las etiquetas

Es importante asegurarse que la fotoprotección cubre un espectro de radiación UVA y UVB.
La radiación UVB produce quemadura solar y cáncer de piel; y la UVA, es la principal causante del fotoenvejecimiento. Los rayos UVA también se relacionan con un mayor riesgo de melanoma. Además, es importante saber si es resistente al agua.

4. No aplicar la fotoprotección 30 minutos antes de la exposición

Los protectores deben ser extendidos sobre la cara y el cuerpo, al menos media hora antes de antes de la exposición al sol.
El motivo es que tardan en absorberse, y la piel quedaría desprotegida los primeros minutos, que es además cuando es más vulnerable a la quemadura. Además, es importante reaplicar la crema cada dos horas, al hacer ejercicio, si hay roce con la toalla y, siempre, después de cada baño o sudar mucho.

5. Pensar que el sol solo daña en la playa y en la piscina

El deporte al aire libre, comer en una terraza o un simple paseo a la luz del día son distintas formas de exposición solar. La radiación UVA, que tiene una mayor longitud de onda, es capaz de atravesar las nubes, los cristales y las sombrillas; a lo que habría que sumar la radiación que se refleja en la arena y el agua. Por lo tanto, es importante usar fotoprotector todos los días, también los días nublados y hasta debajo de la sombrilla.

Referencias:

1.https://www.aad.org/public/spot-skin-cancer/learn-about-skin-cancer/prevent/how-to-apply-sunscreen.
2.https://www.aad.org/media/news-releases/

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